sábado, 21 de abril de 2012

cagontó

Hace bastante que no actualizo, y es que apenas me suceden cosas. Viajé mucho en febrero y ahora por fortuna llevo dos meses sin salir de Copenhague, y sin viajar de ninguna otra forma porque llevo desde octubre sin tocar una novela, como no sea para dar gracias por un regalo, asegurarme de que esté dedicada, y dejarla cuidadosamente a un lado. Me estoy obligando, algo draconianamente, a una dieta estricta de ensayo y literatura técnica. Así explicado queda fino, pero me aburro soberanamente, porque en estas cosas en las que ando metido, el ensayo es muy ensayo-ensayo y la literatura técnica, muy técnica



Leyendo unos artículos, me he encontrado con que un tipo decía que el adverbio literalmente (bueno, literally) era un indicador de sentidos metafóricos.  Eso me ha hecho pensar en que en internet se da muy a menudo un prescriptivismo un poco cazurro, que aunque a veces trata de luchar contra la mala ortografía internauta como el fenónomeno youre o nuestro hoygan tan nostrat, a veces arremete, como un ariete orientado al azar, contra el sentido adjudicado a una palabra.

Lo peor, no obstante, es reconocerme retroactivamente en este empeño censor. Una de las mejores lecturas del año pasado fue sin duda El Quadern Gris, pero Josep Pla hace una cosa que se me hace un tanto cansina, que es usar literalment como intensificador de usos figurados. No tanto porque eso me dé coraje en sí, sino más bien porque me imagino al mismísimo Pla chasqueando los dientes en desagrado cuando alguien usara alguna palabra grande de forma vaga. Me parece que este señor está dando mal ejemplo en su forma manicuadrada de hacerse el listo.

De las primeras  diecieséis apariciones de literalment del Quadern Gris que he encontrado en esta versión digital (el texto original tiene cuarenta), he marcado en rojo siete que me han parecido intensificadores de usos figurados a primera vista, la mitad, a ojo de buen cubero:
  1. la crema literalment exquisida
  2. En aquest país, un home reconegut com a pintoresc per la majoria pot fer, literalment, el que li dóna la gana.
  3. Només un dia la setmana es posa literalment l’abric: els diumenges.
  4. El que és literalment inconcebible és ésser pobre i independent.
  5. A certes hores del dia, a l’hora baixa, per exemple, el perfum de les acàcies, que ara comencen de florir, del carrer del Sol, és d’una dolçor literalment embriagant, una mica massa ensucrada potser, una olor de cromo, excessivament covada, llepissosa, trista.
  6. literatura que, essent, malgrat tot, en certs moments graciosa, demostra que parlant Rusiñol ha de tenir un interès literalment fascinador. La digestió d’aquest compost, predominantment calcari, ha d’ésser molt laboriosa, literalment atlètica.
  7. També es podria resistir si hom tingués el cor literalment ressec.
  8. Així, jo em vaig trobar, adolescent al Canadell, literalment saturat de «Rapsòdia» i de «Clar de lluna».
  9. Tu tens una calba impressionant, inoblidable. De tant en tant, t’hi hauries de fer pintar una figura o un paisatge o simplement fer-t’hi donar unes pinzellades de color. ¿Comprens el que vull dir? Imagina’t l’efecte que faries el dia que hi portessis pintada la Gioconda… Tot el món, literalment tot el món, en parlaria.
  10. El públic del carrer no és pas tan agradable: hi ha tres senyores vestides de vermell, una monja exclaustrada, una senyora vestida literalment de cacatua…
  11. És un home gras, imponent, apoplèctic, l’ull negre, enorme, molt sortit, d’una mirada que regalima, literalment, malenconia.
  12. És simplement el fet de trobar-me davant d’uns senyors que han formulat una pregunta davant de la qual hom no sap, literalment, què contestar.
  13. Sense que es pugui dir que el senyor Carbonell sigui un home esguerrat, sinó que gaudeix d’una salut magnífica, disposa d’una nou del coll que val literalment un imperi.
  14. La gent té una agror crispada, una susceptibilitat malaltissa. És literalment depriment veure fins a quin punt han arribat a convertir aquest món en la quinta essència del que és desagradable.
  15. Quim s’ha trobat enmig, literalment enmig, d’un fet impressionant
  16. Haver arribat en una situació en què, per saturació ambiental, la gent llegeix les notícies dels atemptats personals com qui passa la vista sobre una gasetilla teatral, fa rodar, literalment, el cap.
Hablar de la literalidad de un adverbio es espinoso, y casi no queda más remedio que interpretarla a través de aquello que está modificando (en este caso, intensificando), como ponerse un abrigo o tener el corazón reseco. Pero claro, la postulación de que existe la metáfora implica necesariamente que estamos asumiendo que existe el significado literal. Y eso viene a querer decir que creemos en la existencia de una realidad, sea cognitiva o externa, en la que o desde la que se proyecta el sentido de las palabras.

Pero ojo, esta perogrullada de que usamos metáforas a causa de que creemos que la realidad existe tiene su interés. Es interesante porque, vista desde esta cómoda distancia (unos mil setecientos kilómetros y un contrato hasta finales del 2013) la España contemporánea (i.e. de los últimos cinco meses) me parece pura alegoría, un chiste de Ibáñez sobre el Eterno Retorno. Pero también entiendo que este tipo de observaciones me hacen a mí parecer un gilipollas autocomplaciente cuando mis conciudadanos se van a casa calientes después de una huelga general.

Justamente el hecho de que yo resulte un gilipollas al pensar esto demuestra la existencia de una España literal, desempleada y cabreada, rasgo acaso sintomático o acaso inherente pero en cualquier caso indicador de la existencia de esa realidad, que esta indolencia por mi parte pone de manifiesto. Vamos, que sólo resulta humorístico en lo abstracto lo que es triste en lo concreto.

Pensemos sin más en este par de deliciosas desgracias borbónicas como son Lo de Froilán y lo del JuanCa, acontecidas tan cerca del día de la República. Al menos todo esto está siriviendo para que haya un revival de Berlanga. Lo primero que viene a la mente es La escopeta nacional, pero no puedo dejar de pensar en La Piporra, la marica costurera de La Vaquilla chillando "Viva la República!".

 

Pero en todas partes cuecen habas. En Dinamarca, después de un par de legistaturas del bloque conservador, ahora hay un gobierno de coalición progresista. Y el DF, el partido de derechona populista, que se traduce a sí mismo como el Partido Popular Danés, hace una campaña chulísima en su programa antieuropeísta. Por lo general su publicidad tiene una estética de prospecto de propaganda no ya política, sino del ALDI, pero aquí se han lucido con este cartel de estilo tan nostálgico, sacado de la época de las grandes propagandas y las metáforas sencillas para los problemas simplificados a través de la polarización. La EU es el nuevo contubernio judeomasón.



Aunque está mal pensar que todos los carteles tienen que contener algún mensaje de odio o de exclusión. No todo admite un análisis historicomaterialista de marxista majadero. Hace un par de semanas me puse en el despacho un cartel que compré en Múnich. Está lleno de cosas buenas: animales y alfabeto.



Ese pulpo reposando lánguidamente sobre su T me gusta muchísimo. Y la morsa? Qué puedo yo decir de la morsa? No sé yo si hay mucho conflicto de clases en la forma en la que el búho se posa en la U.

También es importante reseñar lo que se va comiendo. Fabio trajo pescado seco de Islandia, que, como suele pasar, sabía mejor que olía. Bajo estas líneas, una simulación del engaño de Prometeo hecha con pieles de pollo.


Una de las peores cosas de vivir aquí son las verduras, por poco variadas y por chungas. Pero ahora es la época del guisante fresco, y estoy loco de contento.



Pero más que los guisantes me pone contento mi bici nueva. La anterior que me habían dejadoprestado murió en acto de servicio y con lo que tenía ahorrado en un calcetín, he comprado esta preciosidad. A la que de por cierto le falta un nombre.







5 comentarios:

  1. El literalment del punto 3 me mata. Mucho. Será que el resto de días se pone el abrigo figuradamente.

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  2. La semana borbónica ha sido gloriosa

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  3. nunca te falta razón. yo propongo "inbrávida"

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  4. A quin déu intentaves enganyar amb aquestes pells de pollastre tan inquietants?
    La teva nova bici és literalment preciosa, jo li posaria Bogstaveligt (Bogsta o Taveligt pels amics).

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  5. Tens un blog xulíssim Hèctor! Quina entrada més guai! Jo proposo com a nom per la súper bici, que és molt maca, "Sin", que és l'únic que li falta a aquest blog!

    Un petó molt fort!

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